BOLIVIA.-Una nariz roja, unos trapos de colores, varias piruetas y música alegre y contagiosa, motivaron la atención de los ancianos del asilo San José, ayer, cuando el grupo de payasos italianos se hizo presente en el lugar para dar la función titulada "Robarle una sonrisa a la muñeca".
Los ancianos se reunieron en el salón principal del asilo, aplaudieron y rieron ante cada cuadro gracioso presentado por los payasos, sobre todo en la persecución de una mosca traviesa que no dejaba de zumbar entre ellos y de molestar a los protagonistas, quienes, matamoscas en mano, hicieron de todo el ambiente su escenario.
La misma función fue llevada al psiquiátrico San Juan de Dios en la tarde y anunciaron la última función para hoy en la cárcel San Pedro, de Sacaba. Cumplido el programa, la delegación tiene previsto continuar su recorrido en instituciones de Santa Cruz y, de allí, pasar a Brasil y Argentina.
La iniciativa de llegar a varios países e instituciones de acogida, tanto de niños, ancianos, presos, enfermos mentales y de todos aquellos que precisen un poco de entusiasmo, surge, según cuenta el sacerdote dominico Nico Sartori, en Turín (Italia) en 1997. Se trata de una asociación que cuenta con voluntarios que llevan una vida "normal" de lunes a viernes, pero los fines de semana se dedican a compartir, como define Sartori, las "ganas de vivir".
"Vivir en positivo" es el lema que resume todo el propósito de la asociación de payasos, afirma Sartori.
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